Arroz a la milanesa

tiempo de cocinado 15'-15'' min
numero de comensales 4 personas
tiempo total 35' min
numero de comensales Italiana
Calorías por 100g: 475 kcal

Elaboración

  • Reunimos y preparamos todos los ingredientes para elaborar esta receta de arroz a la milanesa, de manera que los tengamos a mano, durante el proceso de elaboración.

    Ingredientes para elaborar esta receta de arroz a la milanesa

  • Pelamos y picamos la cebolla y el ajo, los rehogamos en la cazuela con aceite de oliva y, cuando se doren, agregamos el azafrán.

  • Sofreímos todo a fuego lento para que no se queme y añadimos el tomate rallado. Lo dejamos freír.

    Añadimos el tomate rallado a la sartén y sofreímos a fuego lento

  • Lo mojamos con el vino y dejamos que se evapore el alcohol.

  • Agregamos el Arroz Brillante Sabroz y lo sofreímos unos segundos.

    Agregamos el Arroz Brillante Sabroz a la sartén

  • Añadimos el caldo, rectificamos de sal y dejamos cocinar durante 18 minutos.

  • Pasado este tiempo, lo retiramos del fuego.

    Añadimos el caldo al sofrito

  • El arroz debería de estar algo caldoso todavía, cuando lo apartamos del fuego. Le agregamos el queso, lo mezclamos con una cuchara y lo espolvoreamos con pimienta.

    Agregamos el queso a nuestro arroz

  • ¡Listo! Ya podemos servir nuestra receta de arroz a la milanesa.

Vídeo receta

¿Aún no has elegido la receta de hoy? Poli Delicious te da la receta clave para triunfar en tus almuerzos, dándoles el sabor que necesitas para animarte la jornada. Degusta un increíble arroz a la milanesa, un plato con el que conseguirás trasladarte a la Bella Italia con tan solo una cucharada. ¿Seguimos disfrutando con Arroz Brillante Sabroz?

Receta de Arroz a la milanesa

Arroz a la milanesa, la cremosidad en tu plato

¿A quién no le gusta descubrir recetas con las que viajar a otras culturas? La gastronomía no solo nos da oportunidades impresionantes de seguir descubriendo sabores, sino que también nos pone a prueba ante nuevos retos con los que seguir disfrutando de nuevas texturas, combinaciones y matices. Nunca digas no a probar cosas nuevas.

La auténtica receta de arroz a la milanesa no es, ni más ni menos, que un risotto, uno de los platos más conocidos y apreciados en la cultura italiana. Por sus ingredientes y su textura final obtenemos un cremoso arroz con ese aroma y sabor inconfundible del queso parmesano, un verdadero manjar para los amantes de este producto.

Hay mucha gente que todavía no sabe cómo hacer un arroz a la milanesa cremoso, y es más fácil de lo que se cree. Un truco que recomiendo para conseguirlo es añadir un poco más de caldo que la proporción que se usa para conseguir un arroz seco. Una vez cocido el arroz, sobrará esa pequeña cantidad de caldo extra, la cual será fundamental para derretir el queso que agregaremos en el proceso final, y nos dará esa textura deliciosa buscada.

La cebolla aquí es fundamental, ya que nos ayuda a conseguir esta textura, puesto que cuando se cocine y casi se deshaga, se fundirá en el conjunto, dejando un delicioso sabor dulce.

  • La importancia del caldo en el arroz a la milanesa

¿Seguimos cocinando? Para esta receta de arroz a la milanesa se puede utilizar cualquier caldo, pero te recomiendo uno de verduras o de ave, porque combinan muy bien con el sabor lácteo y el pronunciado picor del parmesano u otros quesos que puedes utilizar, ya sea de vaca, oveja o cabra. Si quieres que tu arroz quede meloso, ve agregando poco a poco el caldo sin dejar de moverlo. Te exigirá más atención, pero el resultado es delicioso.

Recuerda que puedes elaborar otros arroces parecidos siguiendo nuestra receta paso a paso, como el risotto de calabaza en Thermomix. ¿Te atreves a descubrir la magia del risotto?

  • Un truco Brillante: ¡el queso parmesano!

Es un verdadero manjar para los amantes del queso, una oportunidad de disfrutar del sabor de Italia en tan solo un bocado. El queso parmesano se encuentra entre los quesos más conocidos de la gastronomía italiana, junto a la mozzarella, el grana padano o el pecorino romano. Es ideal como aperitivo, para acompañar ensaladas y carpaccios, darle un toque final a tu pasta o incluso a tus risottos. Tiene un sabor intenso, así como un gusto final picante, lo que lo hace tan especial. Una vez lo descubras, no podrás resistirte a incluirlo en tus platos.

Para los más queseros de la casa es un elemento que no puede faltar en la nevera. Además, puedes encontrarlo con facilidad en cualquier supermercado y en varios formatos que van desde la cuña hasta rallado, pasando por las lonchas. Así puedes utilizarlo en el plato que más te guste. ¡Y no te olvides de añadirlo a tus risottos! Les dará un sabor inmejorable  y muy característico. ¡No te arrepentirás!

  • El arroz a la milanesa, un plato con historia

Este arroz a la milanesa, tan famoso de la cocina italiana, es uno de los platos con más historia que podemos encontrar en este país. Y es que su origen se remonta al momento en la que el arroz y el azafrán se unieron para dar lugar a este plato único. Para conocer el origen debemos remontarnos al siglo XVI. 

Cuenta la historia que el aprendiz del maestro pintor renacentista Valerio de Flandes se enamoró de su hija. Resulta que el discípulo italiano era amante de la cocina y para la celebración de la boda decidió preparar un arroz especial. Usó para colorearlo un componente que encontró en el estudio del maestro: el azafrán. Y es que hasta la fecha esta preciada especia se utilizaba tan solo para crear pigmentos de color amarillo. ¡Qué descubrimiento hizo el aprendiz! 

El día de la boda, los platos con granos de arroz de color amarillo, como pepitas de oro, inundaron las mesas de los invitados, que quedaron encantados con la receta. Nacía así el famoso risotto a la milanesa, que se ha convertido en una de las señas de identidad de la cocina italiana junto a la pasta y la pizza

Si tienes un evento especial y decides cocinar este arroz a la milanesa para tus invitados, puedes contarles esta historia mientras lo degustáis. Saber de dónde proceden los platos puede resultar la mar de interesante y hacer de tu velada algo especial. Por cierto, para el maridaje puedes incluir prácticamente cualquier tipo de vino. Y es que desde el tinto joven hasta el blanco afrutado y bien fresquito, pasando por el vino rosado, son opciones excelentes para este plato. 

¿Y de postre? ¿Qué tal un arroz con leche o un pastel de arroz con chocolate? Triunfarás con tu cena sin lugar a dudas.